RATERO RENEGADO


Robin robaba rebaños, reliquias, ropajes... Raudo, rehuía retenes.

Régulo, rey rechoncho, rabioso reclamó respeto.

Robín ,reacio, replicaba:“¡Requerimos reelecciones, reyes rectos..!

¡Referén-dum! ¡Referén-dum!”

Régulo, racista represor, refunfuñaba: “¡Ratero ramplón, ríndete rufián!”

—“¿Rendirme? ¡Renuncia, regente rastrero!”

Régulo redobló regimientos, reduplicó rondines.

—¡Rastréenlo! ¡Recibirán recompensa!

Robin reunió rateros, rancheros reprimidos, reunificó rebeldes, repartió revólveres, rifles rudimentarios.

—¡Reténganlos! —reclamó

Régulo. Rabiosa rebelión, riesgosa revolución. Robín replegó regimientos rivales, restituyó reinos.

Ricos rumbosos, recluidos respingaron rencorosos.

Régulo retobó (rodeado): “¡Rateros rascuaches! ¡Regresaré, réprobos!”

Robin reinó. Repentinamente, racionó recursos, reprimió rancheros, recapturó rateros. Robín resultó ruin.

Reprobándolo, resurgieron rateros raudos, recalcitrantes regicidas.

[Marcos Rodríguez Leija]