Séptimo día


Y el séptimo día Dios descansó, durante el sueño, supo que no era bueno que Adán estuviera solo y mientras este dormía, creó a Eva extrayéndole este una costilla. Pero la pesadilla continuó, Adán y Eva convertían el paraíso en un lugar de pereza, avaricia, lujuria y vanidad. Soñó también que su destruían el paraíso, acababan con los bosques y exterminaba varias especies animales, contaminaba ríos, mares e incluso el aire tan vital para que todo lo demás existiera.

Dios despertó hasta el octavo día agitado, sudoroso y de muy mal humor. Aquella misma tarde, Adán y Eva se comieron indebidamente una manzana. Dios los puso de 'patitas' fuera del paraíso, por aquello de que el sueño fuera un mal presagio y se volviera realidad.

[R.Yohai]